Día Mundial de la Alimentación

Día Mundial de la Alimentación

Mtra. Mónica Minutti Sánchez Alcocer
Coordinadora de la Licenciatura en Nutrición y Ciencia de los Alimentos


La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) con motivo del Día Mundial de la Alimentación 2022, ha declarado el lema: “No dejar a nadie atrás”, el cual,  nos invita a reflexionar sobre las grandes desigualdades de la alimentación que se presentan en el mundo. Aunque se producen suficientes alimentos para alimentar a todos los seres humanos, millones de personas en el mundo padecen hambre y cada año, un tercio de todos los alimentos producidos, equivalentes a 1300 millones de toneladas termina en el desperdicio de los consumidores y vendedores minoristas, o se pierde debido a las malas prácticas del transporte y la cosecha. Si bien, antes del 2019 no se estaba logrando el Objetivo 2 del Desarrollo Sostenible “hambre cero”, a raíz de la pandemia por COVID-19, el problema se agravó, 720 a 811 millones de personas pasaron hambre en 2020 de acuerdo al informe “El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2021”, presentado por diversas organizaciones internacionales, siendo una gran preocupación la inseguridad alimentaria severa que viven estas personas, no debemos olvidar que además, en los últimos años más de 1,250 millones de personas padecieron algún grado de inseguridad alimentaria y que aún en un nivel moderado, no tienen acceso regular a alimentos nutritivos y suficientes.   

Las causas de esta grave desigualdad en la alimentación de los seres humanos en el mundo son de diversa índole, entre ellas se encuentran: intereses económicos, políticos y sociales, conflictos armados, problemas en la cadena de producción y suministro de alimentos, alza de precios, falta de infraestructura y tecnología para la agricultura, falta de capacitación a los agricultores, cambio climático, entre otros que dificultan la producción, distribución y el acceso a la compra de los alimentos, obstaculizando a millones de personas lograr una alimentación suficiente y nutritiva. 

Hoy de forma urgente, debemos posicionar a la alimentación como un tema prioritario de todos los órdenes de gobierno y la sociedad para destacar la necesidad de estrategias de fondo que permitan hacer frente a la situación mundial de la seguridad alimentaria y la nutrición, ya que a este ritmo, no se lograrán los objetivos del desarrollo sostenible de la agenda 2030 y para el 2050 se calcula seremos más de 10,000 millones de personas en el mundo que deberán alimentarse y para ello, será necesario duplicar la producción de alimentos.  

Conscientes de la necesidad de producir más alimentos que lleguen a todas las personas en el mundo, bajo los esquemas actuales no será factible ya que los sistemas agrícolas y ganaderos existentes promueven una gran emisión de los gases de efecto invernadero, desertificación de las tierras de cultivo volviéndolas poco productivas, mayor uso de agua, aplicación poco eficiente de fertilizantes, y por otra parte,  los hábitos de alimentación  en ciertas regiones del mundo son insostenibles, dietas altas en carnes rojas y alimentos ultra procesados que suponen un grave desgaste para nuestro planeta. 

Para producir más alimentos sin este costo para el planeta, debemos adoptar medidas eficientes para reducir la desigualdad de acceso a los alimentos mediante la trasformación hacia una agricultura climáticamente inteligente para sistemas agroalimentarios más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles, que ayuden a lograr una mejor y mayor producción de alimentos y cadenas de suministro que eviten la pérdida y el desperdicio de alimentos y logren la distribución equitativa a todos los lugares del mundo. 

Otra estrategia es la promoción de dietas saludables y nutritivas que fomenten el consumo de alimentos naturales, inocuos, con una menor huella ecológica, provenientes de mercados y comercio responsable y justo, y una clara conciencia de los consumidores por el consumo de las porciones, la compra de alimentos planeada, la preparación de alimentos de manera cuidadosa que evite el desperdicio de alimentos, el rescate de las preparaciones culinarias que tienen como base los alimentos de temporada y típicos de la región, etc.  

Todas y todos podemos hacer acciones individuales y colectivas para que la alimentación sea equitativa, inclusiva y solidaria para “no dejar a nadie atrás”. 

  1. FAO, FIDA, OMS, PMA y UNICEF. 2020. Versión resumida de El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2020. Transformación de los sistemas alimentarios para que promuevan dietas asequibles y saludables. Roma, FAO. https://doi.org/10.4060/ca9699es
  2. Harwatt H, Ripple WJ, Chaudhary A, Betts MG, N Hayek M. Supplement to: Scientists call for renewed Paris pledges to transform agriculture. Lancet Planet Health 2019; published online Dec 11. http://dx.doi.org/10.1016/S2542-5196(19)30245-1
  3. Agricultura, Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. (2021). Marco estratégico de la FAO para 2022-2031. Obtenido de https://www.fao.org/3/ne577es/ne577es.pdf 

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